miércoles, 22 de diciembre de 2021

La desconocida originalidad de los Mínimos

 No hace muchos años un joven investigador sevillano se lamentaba del desconocimiento que “incluso en el seno de la propia institución eclesiástica” existía sobre la Orden de los Mínimos y, especialmente, sobre su presencia en España. Ya constituye casi un error de manual, amparado por la mismísima enciclopedia Sacramentum Mundi, considerar a los mínimos como una rama franciscana. Hablar de los “franciscanos mínimos” no es un yerro excepcional.

Sin embargo, la difícil ubicación de la Orden dentro de la tipología de la vida religiosa siempre puede derivar en un empeoramiento. El año pasado en la Universitat de Girona fue depositada una tesis doctoral que, además de disparates garrafales como indicar la presencia de los mínimos en un determinado período en el monasterio de Santa Eulàlia del Camp de Barcelona, y, pareciéndole a la doctoranda que la Orden tenía características postridentinas, nos engloba dentro del grupo de los Clérigos Regulares. Complimenti!

Es verdad que somos de difícil ubicación. Hubo que esperar a 1567 para que el Papa Pío V explícitamente nos situara entre las Órdenes Mendicantes (condición, que, dicho sea de paso, algunos mínimos parisinos, sálvese quien pueda, trataron de negar cuando la Revolución Francesa). Pero ya en 1470 la primera aprobación diocesana pretendía que los entonces ermitaños de fray Francisco de Paula gozaran de los privilegios de los mendicantes… En fin, si soy clérigo, que lo soy, y tengo una Regla, que la tengo, pues nada “Clérigo Regular”. Caramba, es que hubiera bastado con consultar la wikipedia...


jueves, 16 de diciembre de 2021

Recordando a Padre Clausi

 Parece que Paula se anima culturalmente. Hay que felicitarse de eso. Ha tenido lugar, por ejemplo, un encuentro sobre Padre Clausi. Les inserto el video de You Tube. De otro encuentro sobre filósofos de la edad moderna, sin duda también admirable, no les pongo los videos, porque los han subido en el canal de la Fondazione San Francesco di Paola y, de momento, no los han editado, lo cual convierte su visionado en un calvario irritante. Por cierto, en este de Padre Clausi, si disponen de poco tiempo, vayan a partir del minuto 40, porque todo lo anterior son saludos protocolarios, una acostumbrada sucesión de inciensos mutuos muy del gusto italiano, pero que a los impacientes, a los de andar al grano, se nos puede hacer demasiado largo.